CONSEJOS PARA HACER LA COMPRA

·         Tómate tu tiempo para realizar tu compra, está en juego tu salud.

·         El pan y la bollería industrial es muy probable que contengan leche o trazas de leche. Procura comprar en panaderías tradicionales.

·         Los frutos secos y las papas, snaks y similares    también suelen contener leche.

·         En los establecimientos de chucherías y demás, dónde los productos se adquieren a granel, ten en cuenta que si mezclas las cucharas de los alimentos sin lactosa con las de los que si la contienen,  contaminarás tu comida por contaminación cruzada.  

·         Lee SIEMPRE el etiquetado de los productos, pues es posible que aunque ya los hayas consumido  en el  pasado, el fabricante haya cambiado los ingredientes sin previo aviso desde la última vez que los compraste.   

·         NUNCA te canses de preguntar si lo que vas a comprar contiene  leche. Si un comerciante no es tan amable de responder tus dudas,  quizá  no se merece que le compres a él.

·         La mayoría de los embutidos y algunas carnes  contienen leche o lactosa, por eso, cuando compres al corte alguno que no la tenga asegúrate de que hayan limpiado antes la máquina. Así evitarás  la contaminación cruzada.

Consejo: Si tienes previsto comprar jamón o carne habla con antelación con los dependientes de la carnicería para que corten a primera hora de la mañana tus alimentos con la cortadora recién limpia. 

 

 

·         Estos son  dos de las  maneras  en las que podemos encontrar los alérgenos en el etiquetado de los alimentos:

 
  

Con los alérgenos marcados en negrilla.

 

Con una etiqueta especial con el símbolo de Alérgenos.

 

·         Una vez tienes  la compra en casa hay que poner especial atención en el almacenaje y  manejo de los alimentos. Los que contienen Lactosa o leche deberás guardarlos aislados  en recipientes independientes y cerrados herméticamente.   Acuérdate de lavar los recipientes contaminados  antes de volver a utilizarlos así como los cubiertos.  Es recomendable que por ejemplo, si alguien que convive contigo consume queso, este tenga asignado su propio recipiente para guardarlo en la nevera. Lo mismo sucede con las tazas del desayuno o del café.