Según la nueva normativa
sobre alérgenos, todos los restaurantes deberían mostrar en la carta los distintos alérgenos
que contienen sus platos. Pero la realidad es que casi ninguno lo cumple.
Esta es la tabla que identifica los distintos tipos:
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| Como verás este es el correspondiente a la leche
Si vas a comer fuera de casa estos son algunos consejos
que te ayudarán a terminar con éxito la velada.
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Si en
el restaurante disponen de ella, solicita la carta de alérgenos para ver lo que
puedes o no comer.
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Ten en cuenta que aunque un alimento no contenga
leche, si previamente han cocinado algo
en la plancha o sartén que si la contenga, entonces todo lo que cocinen después
quedará contaminado irremediablemente.
Esto es lo que se conoce como “Contaminación cruzada” Así que no está de más que se lo recuerdes al
camarero para que lo tengan en cuenta en la cocina.
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Todo
lo que cocinen en una sartén después de
contaminada, es como si hicieran esto.
Con lo
cual seguro te sentará mal.
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Evita las salsas, casi todas tienen leche. Si
tienes que compartir un plato con otros comensales que las contenga, por
ejemplo unas patatas bravas, pide que os
las sirvan en un recipiente aparte.
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El pan casi seguro que contiene leche, pero
si es posible pide que te muestren la etiqueta donde vino envasado. Así sabrás
si puedes comerlo. Si no lo tienen claro,
aconsejo que NO te lo comas.
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En las ensaladas pide aliño de aceite y
vinagre porque casi todos los demás (Vinagreta, Cesar, Mostaza y miel)
contienen leche.
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Un consejo: Antes de elegir un restaurante
pregunta si tienen fruta porque si solo disponen de lácteos te quedarás sin
postre.
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Y sobre todo, NUNCA te canses de preguntarlo
todo. Es su obligación informarte.
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